Para ello, antes del ejercicio debemos tener en cuenta si se padece algún tipo de enfermedad que te limite o impida hacer alguno de los ejercicios, no hacer ejercicio físico en las horas en las que se hace la digestión y ponerse una vestimenta adecuada para el ejercicio que vas a realizar.
Durante el ejercicio hay que realizar un calentamiento, no intentar hacer más ejercicio del que puedes soportar y beber agua si el ejercicio es de larga duración.
Después del ejercicio es importante no parar de repente, puedes caminar unos minutos o hacer ejercicios de flexibilidad, si has sudado debes darte una ducha, o al menos lavarte las manos y cambiarte de camiseta hasta que puedas hacerlo, y beber agua.
En el siguiente vídeo te recuerda lo que debes preparar para asearte después de las clases de Educación Física.